En un principio había pensado apuntarme a una clase, pero como en Londres estábamos Fran y yo solos, no tenía nada fácil escaquearme para ir a una clase de 4 horas… (una pena, porque debieron estar muy bien). Así pues, decidí que iba a visitar el market place el viernes.
Llegamos al sitio donde celebraba, en el Imperial College, tardamos un poquillo en encontrarlo, porque entramos por un edificio que estaba más cerca de los apartamentos en los que estábamos.
En el momento que llegamos al edificio en el que se hacía el market place nos dimos cuenta que era allí, puesto que enseguida nos encontramos con knitters (tejedoras). A Fran le flipó muchísimo que hubiera chicas que mientras estaban haciendo cola para entrar (quedaba un ratito para que abrieran) estuvieran haciendo punto… (le queda mucho por ver a mi marido…). El pobre se relajó un poco cuando vio que no era el único “sufridor”.. cuando abrieron las puertas y empezó a entrar la gente al principio no nos dimos cuenta, pero unos segundos después vimos que todas iban en una única dirección… al stand de Rohrspatz & Wollmeise, que por lo que he leído después se debieron llevar la friolera de una tonelada métrica de lana (flipas!!).
Yo no sé si les pasó a otras chicas, pero en mi caso, cuando vi tanta lana, con tantos colores (y sabiendo el precio que tiene) me quedé paralizada.. No sabía qué colores elegir, puesto que son todos impresionantes…
Superado el momento duda, que me dejo algo paralizada… me decidí por los semisólidos y empecé a buscar colores muy saturados… 6 madejitas se han venido conmigo a Madrid (bueno, y a Polonia también…).
En el stand de R&W me pasó algo graciosísimo, de repente una señora se me pone a decirme en inglés…”Oye, pone que son la misma tintada, pero me parecen bastante distintos” a lo que yo le comenté que al ser colores semisólidos, podría pasar que una tintada tuviera más carga de un color que otro y que chequeara bien para encontrar dos madejas lo más parecidas posibles… En algún momento se debió de dar cuenta que yo no era con quién quería hablar y muerta de la risa me dijo que perdonara, pero que pensaba que estaba hablando con su hermana.. pero que muchas gracias por el comentario!! Como llevaba un chal monísimo aproveché a preguntarle que si era de R&W y me dijo que sí y que con una madeja iba a tener suficiente (la eterna duda, cuántas me llevo??). El pobre Fran se quedó en un ladito apartado junto con otros hombres mientras yo buscaba las madejas que me quería comprar… Luego me preguntó, “Oye, por qué se acercan la madeja a la cara??”, definitivamente le queda mucho por aprender…
Seguí comprando: una bolsa conmemorativa del evento, un par de madejas de lanas para teñir y dos tintes para experimentar un poco más en casa y el libro de Ysolda “Whimsical Little Knits 2” y aproveché para que me lo firmara, hacerla una foto y hacerme una foto con ella.. Yupii.
De todo el libro creo que empezaré por Smith el pequeño Erizo puesto que a Fran le hizo bastante gracia.
Como con cada compra te daban unos tickets para una rifa (y Fran no quería quedarse esperando una horita de nada…) pues le dí los tickets a la señora con la que hablé en el stand de R&W, nos intercambiamos nuestras contactos de Ravelry y cuando volví de vacaciones vi un mensaje suyo diciéndome que había ganado un premio… Cuánto me alegro!!!
Alijo del Knit Nation: