30 diciembre 2006

Hoy ha sido el atentado en la T4 y lo hemos vivido en primera persona, mi padre (el que más), Fran y yo. A las 9 de la mañana mientras Fran y yo habíamos facturado las maletas y nos habíamos despedido de mi padre, estábamos en la puerta de embarque para coger el avión para ir a pasar el final del año a Barcelona con la familia de Fran, hemos oído el estruendo y ha vibrado toda la terminal.
Mi padre, al despedirse de nosotros fue al parking y vio que todas las máquinas estaban sin funcionar. Le pidió al señor de la caja si podía cobrarle y le dijo que no, que les había dicho la policía que no podían dejar pasar a nadie al parking. Menos mal que se le ocurrió dar media vuelta e ir a ver la réplica del barco de la copa américa que tienen expuesta en la zona de llegadas.. Justo cuando lo estaba viendo vio la luz de la explosión y se dio media vuelta y se tiró al suelo, porque en ese momento se reventaban los cristales de la terminal.
A él lo desalojaron y le mandaron para las pistas de aterrizaje. Yo en esto ya le había llamado y no pude hablar con él, llamé a mi madre (que estaba currando) y tampoco pude hablar con ella. Volví a llamar a mi padre y ya conseguí hablar con él y me dijo q estaba bien y que les habían mandado a la pista de aterrizaje...
A los pocos minutos, nos desalojaron a nosotros también y ya en la pista, llamé a mi padre, nos encontramos y estuvimos juntos hasta que él pudo coger el autobús hacia la T2 e ir hacia casa. Mientras estuvimos en la pista de aterrizaje, como unas 3 horas, nos llamó un montón de gente, pero lo que más eran mensajes de llamadas perdidas. Todo el mundo allí tenía un móvil de la mano y estaban llamando a su gente para avisarles de lo que había pasado. Mi sensación era por un lado de miedo, porque podía haber otra bomba, a la vez de indignación por la barbarie de esta gente y de vergüenza absoluta. Vergüenza porque la gente ya no tiene sentimientos y se dedica a sacar fotos con el móvil, se pensarían que era un fiestuqui??? Vergüenza porque habría que ver qué es lo que pensaban el montón de extranjeros que había allí, lo mínimo que seguro que se les pasaba por la cabeza es que somos un país bananero. Y también vergüenza porque la gente además de egoísta es muy poco comprensiva. En poco tiempo empezaron a salir aviones y la gente protestando...
Nosotros cuando pudimos entrar a la terminal, nuestro vuelo lo habían cancelado. En información unos nos dijeron que nos fuéramos a casa y otros que volviéramos a la terminal.
Decidimos, comprar algo de comida, ponernos a la cola de la oficina de Iberia y mientras esperábamos a que nos atendieran, llamé a serviberia y cambié los billetes, para un vuelo esa misma tarde a las 16:00.
Entre que el vuelo que salió retrasado, reclamar la maleta, ir a buscarla a la terminal C y llegar a Sant Cugat nos dieron las 8:30, así que llegamos, cenamos y nos fuimos a la cama, porque estábamos reventados.

El día 31, después de la actividad del día anterior, nos tocó ir corriendo a por el dorsal de la Cursa dels Nassos. Conseguimos el dorsal, el chip, etc y ya casi no pudimos más que ver un minutillo a Víctor para desearle Feliz Año (sin besos, porque tenía conjuntivitis alérgica que te cagas y no nos la fuera a pegar...). Comimos en casa de los padres de Fran en Sarriá y allí nos cambiamos y nos hicimos la foto.
Llegamos a la salida con una hora de antelación!! Hicimos el típico trotecito para calentar.
Salimos Fran y yo juntos. Fran aguantó 1 km y un poquillo más a lo que él cree que es mi ritmo... que en realidad es bastante más rápido de lo que yo corro... Nos separamos y cada uno hizo su carrera. Fran llegó en 00:53 y yo en 1:09, que no es una maravilla, pero tampoco está mal, puesto que bajo el tiempo de la Cursa de la Mercé.


Después de la carrera, duchita, fuimos a SantCu, nos pusimos guapos y a disfrutar de la cena de Nochevieja y las uvas...
Con el cansancio de la carrera, nos fuimos a la cama a la 1am.. Vaya abuelitos!!! Mis padres, en Madrid, se fueron de marchuqui y debieron llegar sobre las 6am!!

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